Un visitante del zoológico aprovechó que el gorila estaba cerca del cristal que sirve para ver de cerca a los animales y al verlo al otro lado se puso a jugar con él hasta que le tomó una foto para que este la viera, luego se la mostró y el gorila no se puso agresivo ni nada de eso si solos e quedó mirando cómo se había plasmado su imagen en el teléfono inteligente.
Los gorilas son altamente agresivos si se invade sus dominios pero este parecía muy tranquilo al ver de cerca a esta persona que utilizó todo su ingenio para agradar a este primate, hasta parecían amigos en el final del video pues se sentado casi juntos y solo separados por el cristal.
La curiosidad del mono grande pudo más y no se resistió a seguir viendo cómo funcionaba este teléfono, el hombre actuaba como un gorila y quizas por eso fue que el primate no se sintió intimidado y actuó como si estuviera con alguien de su especie.
0 Comentarios