Un bebé recién nacido es muy delicado ya que su cuerpo tiene un fragilidad que posiblemente no volverá a tener en el resto de su vida, por ello lo primero que se debe tener en cuenta es que se debe hacer con delicadeza, las manos de las mujeres son perfectas para este tipo de labores ya que son más hábiles que las de los hombres para muchas tareas y como son más pequeñas y sensibles son las que se necesitan excepto que no haya una mujer disponible, entonces la tarea deberá ser asumida por un hombre.
La manta de un bebé normalmente es en forma cuadrada por lo que si se la coloca en forma de rombo sería el inicio de esta tarea, una de las puntas de este rombo debe quedar en arriba de la cabeza del bebe y ser doblada hasta la altura del cuello de este.
Luego de esto los siguientes pasos son muy sencillos ya que de la mano derecha del bebé se debe jalar la la punta de la manta de ese lado hasta cubrir al bebé con todo ese lado de la tela, luego nos quedarán dos puntas de la manta, una que es la de abajo y la otra la de la mano izquierda del bebé.
Con la punta de abajo cubrimos hasta el hombro derecho del bebé, nos quedará solo la punta de la mano izquierda y así terminaremos cubriendo su cuerpecito con esta y tratando de que la punta de abajo y la última que jalamos para acomodar al bebé se una de la forma que prefieras.
0 Comentarios